Detalles sobre San Judas Tadeo Oracion
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Intercede por nosotros ahora para que sintamos el cariño de su amistad, el calor de su presencia, y el poder sanador de su espíritu. Ya que nada es realmente difícil para nuestro Dios, solicitemos que él nos cure de toda clase de enfermedad del cuerpo y del alma. Te consagro mi cabeza a fin de que en todo proceda a la luz de la fe; mi corazón a fin de que lo almacenes puro y lleno de amor a Jesús y María; mi intención a fin de que, como la tuya, está siempre unida a la intención de Dios. Pero, al mismo tiempo, estamos movidos a suplicarte que no cese jamás tu asistencia y protección. En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Beato. Confiamos en que el padre va a oír todas y cada una de las oraciones brindadas en el nombre de Nuestro Señor Jesucristo, y nos unimos ahora en oración al Apóstol San Judas, quien goza en los cielos del triunfo de la muerte y resurrección de Cristo. Unidos a las oraciones de alabanza y solicitud de San Judas a Dios rezamos estas devociones.
- Por ello, te ofrecemos el homenaje de nuestra devoción, memoria de los favores ya recibidos y llenos de gratitud por la asistencia concedida.
- «Está enfermo alguno de vosotros?
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Oh, San Judas Tadeo, Apóstol de Jesús, te saludo en su Corazón y por medio de este Corazón alabo y doy gracias a Dios por todos los favores que te ha concedido. V/ Las ánimas de los leales difuntos por la Misericordia de Dios descansen en paz. Cordero de Dios, que quitas el pecado de todo el mundo, ten piedad de . Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, escúchanos, Señor. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo, perdónanos, Señor.
Oh Dios, cuya clemencia no posee límites y cuya amabilidad es un tesoro inagotable, te damos gracias por los beneficios que nos has concedido, implorando de tu bondad que no abandones a quienes has escuchado y que nos dispongas para los bienes futuros. Bendito eres Señor en lo más prominente del cielo. Te rogamos, pues, que vengas en ayuda de tus siervos, a quienes redimiste con tu hermosa sangre. Tú te sientas a la derecha de Dios, en la gloria del Padre. Tú eres el Rey de la gloria, Cristo.
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Devuélveme la alegría de tu salvación, que tu espíritu desprendido me mantenga. amas la sinceridad del corazón y me enseñas la sabiduría en mi interior. El que habita en los cielos se reirá de ellos, se burlará de el Señor. Se han levantado los reyes de la tierra, y se han reunido los príncipes contra el Señor y contra su cristo. Danos Señor, te solicitamos, poder apagar las llamas de nuestros vicios.
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5) ¿Y qué tenemos la posibilidad de llevar a cabo nosotros sin la asistencia de Dios? Dígnate, o amigo de Cristo, de obtenernos que vivamos unidos a con espíritu de oración y frecuentando los Beatos Sacramentos. 4) Ni la fe es útil, ni la caridad es franca si no se corresponden con las buenas obras. Haz, oh, infatigable Apóstol, que imitándote, no seamos cristianos solo de nombre, sino también de obra. Suplica por nosotros, para que seamos aceptados en la compañía de los santurrones y gocemos eternamente de la existencia de Dios. A través de la publicación de un comentario, está de acuerdo con nuestra política de comentarios en esta comunidad.
Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu intención en la tierra como en el cielo. San Judas Tadeo, tan enorme fue tu celo beato que hiciste salir de los Ãdolos a los diablos. Consígueme del Señor, que detestando los Ãdolos que me dominan, adore sólo a mi Dios.
Tú eres el Hijo único del Padre. Esta es la fe católica, y quien no la crea fiel y firmemente no se va a poder salvar. Y los que hicieron el bien gozarán de vida eterna, pero los que hicieron el mal irán al fuego eterno. Ya que como el alma racional y el cuerpo forman un hombre; de este modo, Cristo es uno, siendo Dios y hombre. Es Dios, engendrado de la misma substancia que el Padre, antes del tiempo; y hombre, engendrado de la substancia de su Madre muy santa en el tiempo. La fe verdadera radica en que creamos y confesemos que nuestro Señor Jesucristo, Hijo de Dios, es Dios y Hombre.
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